Aunque no es una definición aceptada necesariamente por todos, la Unesco decidió hace muchos años establecer una diferencia entre "folleto" y "libro". Hasta 48 páginas sería un folleto. A partir de 49, un libro.
Desde el punto de vista impresor, es difícil concebir una publicación de 49 páginas. En el sistema tradicional, después de las 48 páginas vienen las 56 páginas. Eso sería un libro. Una portadilla, algunos créditos... si reducimos al máximo esas porciones, intentaríamos garantizar 52 páginas para los contenidos poéticos. Salvo acuerdos con colectivos, que podrían ser especies de antologías o compendios, la idea sería unir a dos autores en cada libro. En condiciones óptimas, 26 páginas para cada uno, lo que daría en ocasiones para un poemario breve muy digno.
Sería en octavo, es decir un formato pequeño de bolsillo, pero la edición sería, aunque sobria, elegante. Quizá una serie intonsa y otra canteada...
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